Vivir sin consumir.

Tener mucho o poco, adquirir lo que los deseos del ego imponen, movernos por la atención que estamos acostumbrados a dar a las necesidades que crea y tratar de satisfacerme complaciendo todo lo que pide, hará que pierda el cuidado de lo esencial, de aquello que verdaderamente importa.

Este confinamiento es en el interior para alejarse del ruido que, escuchando todo afuera, ha impedido que escuchemos nuestra propia voz.

Es un llamado del silencio para habitar nuestra casa, ahí donde vivimos con todo lo que hay y con lo que sentimos.

Muchos no hemos estado en contacto con ese espacio que puede ser desconocido. 

Convivir con los que nos rodean cotidianamente y que por ocuparnos del trabajo,de muchos entretenimientos y distractores descuidamos.

Retomar el acercamiento a los que amamos. Mirarnos a los ojos y darnos el amor y la atención necesaria para alimentar al corazón.


Amelia Camacho Guerrero.

19 marzo 2020.

El color morado.

Este color morado es hoy el símbolo del valor que muchas mujeres en el mundo usamos para expresar nuestra presencia y nuestra voz. 

Nadie olvidará las imágenes de una ciudad pintada de luz y de emoción. Todas hemos de mantener vivo este recuerdo. El recuerdo de la unión, de la consciencia que ha hecho que podamos salir a vernos con la cara descubierta iluminada por el sol, reconociendo a otras mujeres a nuestro lado y la necesidad de hacernos notar en un mundo que ha olvidado el respeto por la vida y por lo primordial en la existencia.

Este color nos recordará siempre este día.

Este color tiñe los corazones de emoción y sacude las emociones de odio y venganza.

Este color invita a manifestar el espíritu y el amor para que el propósito fundamental de estás acciones se cumpla.

No más violencia ! No más abuso !  No más dolor ! No más ignorancia !

Sea la determinación, la fuerza inteligente, la convicción, la certeza de recordar que somos la expresión de una poderosa fuerza creadora capaz de hacer cambios trascendentes.

Unirnos por encima de todo y lograr que nuestras voces conscientes del poder integrador que nos asiste muevan los corazones más endurecidos para construir la realidad que queremos vivir.

El camino se abre y habrá que recorrerlo con valor y persistencia, confiemos en nosotras y en la consciencia que ha despertado.

Todas , en esencia, somos lo mismo.

Solo la consciencia nos hace diferentes.


Amelia Camacho Guerrero.

9 marzo 2020.

La mujer en el mundo de hoy.

Vemos esta presencia manifestada en muchas y variadas formas. El espejo que nos refleja en cada palabra, en cada acción, en cada pensamiento muestra y nos deja ver como la mujer vive y experimenta este tiempo.

Para ninguna ha de ser algo ajeno. Todas vivimos situaciones y circunstancias distintas y aún así podemos solidarizarnos con todas. Muchas viven experiencias inimaginables y muy dolorosas, otras en la intimidad , también nos pueden expresar sentimientos y tratos que nos sorprenden.

Es momento de reflexión para todas. Es tiempo de  escuchar y ser escuchadas, primero por nosotras mismas y luego por la colectividad. Ser empáticas, dejar de juzgar, evitando todo pensamiento que desvirtúe el verdadero propósito de esta expresión mundial. 

El despertar de la consciencia femenina es fundamental para la evolución de la especie humana. Este despertar es tambien para los hombres que son compañeros de vida.

Juntos podemos crecer y favorecer un trato consciente para todos, un  respeto hacia lo que somos y son los demás.

Todo parte de cada uno. Todo ha de ser revisado desde el interior.

La sociedad en que vivimos está muy dañada y tenemos que sanarla, sanandonos todos, uno por uno podremos hacer el cambio.

Nadie puede hacerlo sin nosotros.

Todo empieza hoy ... pero es una acción permanente para todos.

Toda la luz , todo el amor, toda la guía superior en cada corazón que hoy eleva su voz para crear una realidad consciente.


Amelia Camacho Guerrero.

8 marzo 2020.

¿ Y tú vives violencia ?


Creamos la realidad que vivimos.  Vivimos el resultado de todo lo que emanamos. Nuestra mente construye lo que manifestamos en cada pensamiento, en cada acción que realizamos. Todas nuestras respuestas y reacciones están matizadas por lo que ponemos en ellas.  

Los significados e interpretaciones de cada impresión y evento son el resultado del contenido de la consciencia que tenemos para comprenderlo todo.

Podemos no reconocer la violencia guardada en el interior , podemos no percibir que cada experiencia vivida ha dejado huellas de inconformidad, frustración, fracaso, tristeza, dolor, desamor, abandono, soledad, que muchas veces se convierte en violencia interna. Todo esto se proyecta en palabras, acciones, respuestas cargadas de la necesidad de satisfacer lo que alivie este estado de vacío.

No hay forma de obtener la satisfacción personal cuando se piensa que otros son responsables de este resultado.

La ignorancia de uno mismo, la ausencia de responsabilidad de la propia vida, la sociedad y la programación en la que se vive, la cultura en la que nos desenvolvemos no favorecen para dar una orientación adecuada a la problemática personal. 

Hombres y mujeres acumulan violencia que despliegan en sus relaciones, empezando por la relación consigo mismos. La tortura mental, el descuido de la salud, la autodevaluacion, el estrés causado por tener que satisfacer las exigencias de otros y muchas más razones, provocan que los individuos vivan un estado de violencia que no reconocen pero que se expresa en variadas maneras.

Cuando hay un detonante explota y sirve para hacer causa común con lo que permita la liberación de esa energía acumulada.

Solo la consciencia ayuda a tomar responsabilidad de lo propio.

Conocernos, atender a las propias formas de respuesta que ofrecemos en la vida es un camino necesario para crear realidades que estimulen el desarrollo de todos los seres humanos.

Sanar la violencia interior para reducir la violencia exterior.


Amelia Camacho Guerrero.

3 marzo 2020.

Salud mental.

Tener una mente sana ha de ser un objetivo primordial.  No nos imaginamos todo lo enferma que puede estar. No reconocemos fácilmente lo que hay que sanar.  Nos preocupamos por aquello que pudiera contaminarnos y al mismo tiempo ignoramos que hace falta cuidar no sólo la salud del cuerpo.

La mente enferma el cuerpo y la forma en que vivimos. Cuidar la mente equivale a cuidar la salud ,no solo de cualquier posible contagio, sino de aquello de lo que enferma la vida todos los días.

Cuidar lo que comemos, lo que oimos, lo que pensamos, lo que sentimos aprendiendo a digerir las impresiones que nos pueden dañar. La dieta es simple. Su mejor ingrediente es el amor por uno mismo.  No te preocupes por ser contagiado, ocúpate mejor de no contagiar a nadie con una mente enferma.

Tomar diariamente la dosis necesaria de responsabilidad personal, que así también tendremos responsabilidad hacia los demás.


Amelia Camacho Guerrero.

1 marzo 2020.

La epidemia de miedo.

Conveniente es darnos cuenta de como procesamos toda la lluvia de información que diariamente recibimos por todos los medios de que disponemos.

Hoy hace falta poner mucha atención en lo que recibimos y en lo que transmitimos.

Muy pendientes hemos de estar de una información clara para no permitirnos caer en percepciones equivocadas procedentes de los miedos de la colectividad.

Buscar información ,enterarse de lo que sucede y consultar con personas que conozcan el tema, ser muy cuidadosos con nuestras emociones y sobre todo,no difundir de maneras irresponsables .

Aplicar el conocimiento que hemos adquirido para convertirlo en experiencia propia. Recordar constantemente que nuestra palabra tiene poder y crea la realidad que experimentamos.

No expreses aquello que no deseas que se manifieste en tu vida. Elimina la creación de experiencias que te lastimen o que por miedo produces en tu interior.

Este tiempo favorece para limpiar todo lo que en nuestro interior existe y no ha podido ser trascendido.

Todo lo que está brotando con las impresiones que día a día recibimos es para ayudarnos a crecer reconociendo lo escondido ,lo que aún no aceptamos de nosotros mismos.

Evitemos difundir el miedo, la angustia, la preocupación y actuemos con consciencia para todos.


Amelia Camacho Guerrero.

1 marzo 2020.

Opiniones y razones.

Puedes tener todo tipo de ideas y de información sin embargo la realidad rompe todos los esquemas y las estadísticas.

Lo que se vive,lo que se ve día a día es innegable.

La acción que se ha propuesto para hacer presente la necesidad de cambio en la humanidad hacia las mujeres pero también hacia los hombres, ha sido motivo para provocar la expresión de todos. 

La claridad de pensamiento puede observarse al escuchar a hombres brindando su apoyo, a mujeres hablando de otras mujeres , a quienes comprenden que esto es mucho mas que un acto cívico o social. Esto representa una expresión de la humanidad, de la especie humana que en todo el mundo despierta por la necesidad de cambio. Siglos han pasado y esto ha ido creciendo hasta llegar a los límites que ha alcanzado. Esto es indicio de algo mayor.

Algo que está por encima de la política y de los movimientos sociales.  Es una transformación necesaria que está moviendo todo, en todas partes.

Los niveles de observación son diferentes.

Todas las opiniones hablan de las personas y de su comprensión del tema.

Todo también nos habla del nivel de consciencia con que se ve la realidad y el mundo en que vivimos.



Amelia Camacho Guerrero.

24 febrero 2020.

El ciclo que no se detiene nunca.

La época que nos está tocando vivir nos muestra un camino evolutivo con infinidad de experiencias inimaginables. Todos los que hoy vemos está realidad con asombro y que nos percatamos de otras formas de existencia , percibimos expresiones que parecían muy lejos de suceder en esta vida.

Todo sucede muy rápido y todo cambia con  velocidad sorprendente. La mente percibe mucha información que no alcanza a procesar. Se detiene y a veces se paraliza deseando que las situaciones y circunstancias sigan siendo las conocidas ,porque las nuevas  resultan difíciles de aceptar.  El mundo conocido se fue. El mundo actual resulta para muchos desconcertante.

Mover creencias y paradigmas anteriores para actualizarse y vivir conforme a la época actual exige voluntad de cambio , darse cuenta de la obsolecencia de todo aquello que paraliza y moverse en aceptación de lo que ya no es vigente.

El paso de los años exige ahora una aceptación a prueba de todo. El tiempo es ahora una oportunidad para cambiar y exponer la sabiduría ganada.

Tal vez en la mente de muchos esta turbulencia nunca ni siquiera se podía pensar.

Ayudarse a vivir en paz, en armonía con todo requiere de atención y cambio en la manera de pensar.  La rigidez en la mente es la rigidez en la vida.


Amelia Camacho Guerrero.

23 febrero 2020.

La espiral infinita.

La presencia femenina en toda la creación habla de creatividad, de la fuerza de la vida en todo lo creado.

La especie humana está viviendo un despertar producto de la evolución natural que ahora conduce a un equilibrio de las fuerzas de creación que han existido siempre.

Esto está fuera de toda política y de toda ideología. Los factores que intervienen son propios de toda especie en evolución.

Ver más allá de las apariencias nos permitiría comprender que la humanidad está tomando un camino que la conduce a otro nivel de consciencia.

El caos que estamos viendo es un proceso de cambio muy profundo y a veces muy difícil de entender al ver y experimentar lo que tenemos en el escenario donde vivimos.

Todas las manifestaciones que hay son muy dolorosas e impactantes, provocan, todas ellas, diferentes respuestas.

Hoy , las mujeres, como en otros lugares y países, alzan la voz y expresan su dolor y la necesidad de ser escuchadas.

Mujeres que invitan al despertar de ellas mismas y de los hombres, en una consciencia que eleve la condición humana para tener unidad y no una guerra de sexos. Nada que ver con eso.

Todos tenemos oportunidad de eliminar la violencia, mujeres dentro de si mismas y hombres en su interior para ser capaces de ser lo que realmente somos: los espíritus que aman y que ven los unos por los otros, que se respetan y se ayudan.

Es un tránsito en un renacimiento muy doloroso. El nacimiento en consciencia que obliga ver hacia el interior y hacia el encuentro con lo más elevado, lo superior que vive en cada ser humano.

La fuerza que existe en todos es masculina y femenina y ambas polaridades hacen de nosotros lo que somos. Ninguna es más que la otra. Ambas son necesarias en la creación de la vida en todas sus formas. Así es toda la creación.

Hagamos de este proceso una defensa por la vida manifestada en cada respuesta.

Imaginemos el nacimiento de una humanidad consciente creciendo en armonía y en amor,capaz de diluir las diferencias buscando la unidad entre todos.

El mundo está incompleto sin mujeres, ¡ Pero también sin hombres !

Ambos somos la especie humana, ni más ni menos. Todos necesitamos reconocernos en consciencia de lo que somos.

Mucho es lo que hay que dejar atrás para hacer cambios trascendentes.  Aprendizajes, costumbres, hábitos, tradiciones, creencias, para lograr los cambios necesarios para crear una experiencia humana diferente.

No son las leyes, tampoco las reformas , es la consciencia de todos la que hará el cambio.


Amelia Camacho Guerrero.

22 02 2020.

La sombra en el amor.

Amar a otro no es muy sencillo, si uno no ha sido capaz de conocer y aceptar la propia parte desconocida de uno mismo.

Por esta razón el trabajo interior es parte fundamental en el proceso de evolución de todo individuo.

Se puede pensar que el amor está presente cuando todo resulta bien, cuando todo parece aceptable y las personas hacen , piensan y demuestran lo que cada uno quiere. Cuando las expectativas se cumplen, cuando las imágenes creadas en la mente se reflejan en lo que se vive.

Sin embargo todo cambia y la realidad nos muestra aspectos, en toda relación, para salir del sueño creado y es entonces cuando hace falta aplicar el conocimiento personal para poder superar lo que contradice la fascinación y el sueño creado.

Podemos prometer amor eterno en los momentos de enamoramiento, podemos jurar muchas cosas que más tarde no seremos capaces de cumplir, podemos creer que hubo honestidad pero la verdad es que hubo muchas cosas que no veíamos y que al descubrirlas resultan inaceptables y pueden hacernos sentir traicionados.

No existe tal engaño. Lo que hay es una profunda inconsciencia. Un deseo enorme de ser amados y aceptados, necesidades no reconocidas y puestas en otra persona para ser atendidas.

Darse cuenta de esta realidad es muy doloroso y descubre la parte oscura de los participantes. Oscura por desconocida, porque revela la propia ignorancia de uno mismo, la irresponsabilidad de la propia vida y de lo que sucede en el interior de cada uno.

Superar los requerimientos egoicos, aceptar lo que somos y son los demás, exige crecimiento y desarrollo psicológico, para poder trascender la imaginación y creación de personajes ideales que nunca existirán de acuerdo a nuestra mente. Esto se da en todas las relaciones que vivimos, inventamos a las personas como las necesitamos.

Todos deseamos ser aceptados y amados, todos queremos ser reconocidos y para ello habrá que vernos en totalidad, somos luz y también sombra , somos espejos los unos de los otros.  Amarnos es vernos en el que amamos. Nos amamos a través del amado.

La convivencia con otro es la convivencia con uno mismo. Hay tanto que aprender. Despierta la consciencia de tu propio ser y despierta la inmensa capacidad de amar que hay en tu interior.


Amelia Camacho Guerrero.

15 febrero 2020.