El ciclo que no se detiene nunca.

La época que nos está tocando vivir nos muestra un camino evolutivo con infinidad de experiencias inimaginables. Todos los que hoy vemos está realidad con asombro y que nos percatamos de otras formas de existencia , percibimos expresiones que parecían muy lejos de suceder en esta vida.

Todo sucede muy rápido y todo cambia con  velocidad sorprendente. La mente percibe mucha información que no alcanza a procesar. Se detiene y a veces se paraliza deseando que las situaciones y circunstancias sigan siendo las conocidas ,porque las nuevas  resultan difíciles de aceptar.  El mundo conocido se fue. El mundo actual resulta para muchos desconcertante.

Mover creencias y paradigmas anteriores para actualizarse y vivir conforme a la época actual exige voluntad de cambio , darse cuenta de la obsolecencia de todo aquello que paraliza y moverse en aceptación de lo que ya no es vigente.

El paso de los años exige ahora una aceptación a prueba de todo. El tiempo es ahora una oportunidad para cambiar y exponer la sabiduría ganada.

Tal vez en la mente de muchos esta turbulencia nunca ni siquiera se podía pensar.

Ayudarse a vivir en paz, en armonía con todo requiere de atención y cambio en la manera de pensar.  La rigidez en la mente es la rigidez en la vida.


Amelia Camacho Guerrero.

23 febrero 2020.