La espiral infinita.

La presencia femenina en toda la creación habla de creatividad, de la fuerza de la vida en todo lo creado.

La especie humana está viviendo un despertar producto de la evolución natural que ahora conduce a un equilibrio de las fuerzas de creación que han existido siempre.

Esto está fuera de toda política y de toda ideología. Los factores que intervienen son propios de toda especie en evolución.

Ver más allá de las apariencias nos permitiría comprender que la humanidad está tomando un camino que la conduce a otro nivel de consciencia.

El caos que estamos viendo es un proceso de cambio muy profundo y a veces muy difícil de entender al ver y experimentar lo que tenemos en el escenario donde vivimos.

Todas las manifestaciones que hay son muy dolorosas e impactantes, provocan, todas ellas, diferentes respuestas.

Hoy , las mujeres, como en otros lugares y países, alzan la voz y expresan su dolor y la necesidad de ser escuchadas.

Mujeres que invitan al despertar de ellas mismas y de los hombres, en una consciencia que eleve la condición humana para tener unidad y no una guerra de sexos. Nada que ver con eso.

Todos tenemos oportunidad de eliminar la violencia, mujeres dentro de si mismas y hombres en su interior para ser capaces de ser lo que realmente somos: los espíritus que aman y que ven los unos por los otros, que se respetan y se ayudan.

Es un tránsito en un renacimiento muy doloroso. El nacimiento en consciencia que obliga ver hacia el interior y hacia el encuentro con lo más elevado, lo superior que vive en cada ser humano.

La fuerza que existe en todos es masculina y femenina y ambas polaridades hacen de nosotros lo que somos. Ninguna es más que la otra. Ambas son necesarias en la creación de la vida en todas sus formas. Así es toda la creación.

Hagamos de este proceso una defensa por la vida manifestada en cada respuesta.

Imaginemos el nacimiento de una humanidad consciente creciendo en armonía y en amor,capaz de diluir las diferencias buscando la unidad entre todos.

El mundo está incompleto sin mujeres, ¡ Pero también sin hombres !

Ambos somos la especie humana, ni más ni menos. Todos necesitamos reconocernos en consciencia de lo que somos.

Mucho es lo que hay que dejar atrás para hacer cambios trascendentes.  Aprendizajes, costumbres, hábitos, tradiciones, creencias, para lograr los cambios necesarios para crear una experiencia humana diferente.

No son las leyes, tampoco las reformas , es la consciencia de todos la que hará el cambio.


Amelia Camacho Guerrero.

22 02 2020.