Despertar de consciencia y despertar espiritual.


Aunque van juntas , no son lo mismo.

Las tendencias actuales nos ofrecen cantidad de alternativas para lograr esa amplitud de consciencia que permite tener una percepción distinta ante la realidad que experimentamos.

Cada avance en la captación de información y de datos que abren la mente a diferentes visiones es una expansión de lo que hasta el momento no existía en el escenario de la vida.

Por supuesto que cada nueva percepción rompe creencias y paradigmas anteriores y cambia incluso la actitud y forma de pensar de una persona.

Esa transformación es mayor cada vez que la mente se exponga a nueva información .

El cambio en la manera de pensar es una metanoia, un paso hacia una comprensión mayor porque es justo a través de la comprensión que se logra el cambio.

La consciencia avanza y deja atrás ideas y conceptos que fueron construyendo una identidad que ya no se ajusta a la nueva visión que , una vez ampliada, ya no puede seguir siendo igual.

Los ojos parecieran diferentes y son los mismos pero ahora perciben de manera diferente. Una vez que la consciencia despierta y abre su potencial de observación, de percepción, de inclusión, ya no vuelve a ser la misma.

Darse cuenta de lo que no existía en la realidad personal, de lo que la mente no veía, es captar la información y experiencia que ahora se tiene con una profundidad y mentalidad que facilita la relación con todo.

Se introducen en la respuesta cotidiana actitudes de aceptación y respeto, de atención y reconocimiento que ofrecen otros estados internos que favorecen la tranquilidad y armonía.

Una respuesta valiosa en este periodo es la responsabilidad de la vida propia y el incremento de la confianza y amor por uno mismo.

Al acercarnos a este mundo interior nos interesamos por descubrir lo que somos.

Es ahí donde se vive el contacto con la esencia y la búsqueda del ser. Es el inicio del despertar espiritual.


Amelia Camacho Guerrero.

3 marzo 2024.

Inspiración y manifestación.


Se aproxima el inicio de la primavera, con energía que renueva y despierta la creación con impulsos generados por la conexión entre los planetas y sus influencias en una era que inicia y propicia diferentes actitudes.

Para muchos seres humanos puede representar un cambio, un despertar que hace que todo se vea de una manera distinta.

La verdad es que nos trae oportunidades de evolución y de transformación que cada uno puede asumir o ignorar.

Seamos conscientes de lo que nos da.

Introspección y contacto muy activo en el interior y la divinidad de mi propio ser.

Crear todo aquello que permite que la que yo soy exprese lo que tiene dentro.

Oportunidad para ir en profundidad hacia todo lo que no hemos atendido en nosotros y sacar emociones, intenciones, acciones que no se llevaron a cabo. Unidad con lo que somos, reconocernos en todo lo que es.

Encontrarnos en cada una de las personas que están muy cerca de nuestro corazón y son la misma divinidad en diferentes cuerpos viviendo sus propias experiencias y evolucionando en el recuerdo de la identidad olvidada.

Vivir la vida desde el recuerdo de lo que somos y darnos cuenta de que ya no somos los que éramos, somos nuevos y hemos tenido que dejar atrás lo que ya no requerimos.  Este tiempo nos da la oportunidad de comprender por encima del lenguaje, vamos ahora a sentir el conocimiento y a expresar lo que sabemos de una manera diferente.

Habrá momentos que nos conectan con ese interior que tiene todo para mí.

" Yo Soy ", se hace presente con la unidad en todo, la intuición en mi mente sana.

Una comprensión intensa que me conecta con la totalidad. Conecta con el amor, con la naturaleza, con el corazón en el amor más sublime y elevado.

Tiempo de grandes emociones. 

Y es por medio de las emociones que nos acercamos más a nosotros mismos.  Vamos sin temores, no miedos, con confianza de lo que nos enseñan, con alegría de conocernos y reconocernos para finalmente aceptar nuestra divinidad y vivir el amor más sublime.


Amelia Camacho Guerrero.

27 febrero 2024.

Impecabilidad en la palabra.


La verdad, la sinceridad y la claridad de pensamiento dan limpieza a la expresión y hacen que sea impecable nuestra forma de comunicarnos.

La consciencia y la atención en lo que se quiere decir es un elemento que hay que incluir.

La elegancia en la expresión no se refiere a un vocabulario rebuscado o lleno de sofisticación y de expresiones complicadas.

La elegancia es un estado de simpleza , de ausencia de elementos que hagan que la expresión se recargue de conceptos que dificulten la comunicación y la fácil interacción con uno mismo y con los demás.

El diccionario dice:

" La elegancia o el galibo es la apreciación estética que se asocia con el buen gusto, la distinción o el estilo de lo que se hace que algo o alguien destaque del resto por ser agradable, armonioso, delicado, bello , fino, alejado de todo lo que puede parecer vulgar, estridente, común o recargado. "

La expresión en consciencia es cada vez más clara y sencilla, más natural y espontánea.

La falta de claridad mental complica la expresión de ideas y la habilidad lingüística no se puede mantener. Faltan las palabras porque falta la claridad.

Si no se puede poner en palabras no nos pertenece.

La elegancia en la expresión es la presencia del ser. La elegancia no está en lo que se viste, está en el ser.

La forma sencilla, sin complicaciones, sin dificultades, llena de naturalidad de espontaneidad,sin rebusques de ningún tipo se convierte también en una forma de vida.

Todo esto acompañado de la aceptación es lo que hace una forma de disfrutar y de apreciar la experiencia humana. Todo es posible, todo es fácil. Nada representa una amenaza ,ni miedo , ni temor.

La elegancia es una virtud del ser, no se aprende ,es resultado de la esencia manifestada en cada acto de la vida.


Amelia Camacho Guerrero.

24 febrero 2024.


Evasión o creación.


Esto se puede entender de maneras distintas. Por esa razón es nuevamente mencionado que la comprension desde la consciencia no es lo mismo que el entendimiento desde la visión lineal de la vida.

Hablamos de creación , de la manifestación de la sabiduría producto de la consciencia de uno mismo para que la realidad que se vive tenga un fundamento en la aceptación de lo que es sin resistencia ni lucha interior.

No se trata de evadir una realidad que no nos gusta. No se trata de escapar de aquello que amenaza nuestra comodidad o nuestro estado de comfort.  No es huir de una realidad con la que no se puede convivir. No es tratar de cambiar todo a nuestro gusto.

Crear una realidad proveniente de lo que hemos podido conocer, comprender e integrar es vivir en la consciencia de que en el interior se pueden manifestar las virtudes del espíritu que se es para así convivir en un mundo al que no se pertenece pero que se habita en el.

 Un mundo que  ofrece al individuo todas las impresiones para el desarrollo de la consciencia de sí mismo y que las aplica haciendo que su mundo interior sea colmado de lo que su espíritu le dicta.

Crear y vivir lo creado en el espacio de la consciencia que es donde se vive realmente y dónde uno es el el amo.


Amelia Camacho Guerrero.

20 febrero 2024.

Cultivando una mentalidad de abundancia.


El aprecio por la vida y por todo lo que es valioso para uno hace que el agradecimiento brote en cada pensamiento y crea un estado interior que genera el  asumir la abundancia en la que se vive.

Cultivar ese estado es ser conscientes de que ese es el tesoro que nos conduce a disfrutar todo lo que tenemos y somos, hace que vivamos en una frecuencia vibratoria diferente.

Tener consciencia del estado de bienestar y abundancia que habita en nuestro ser es conocer lo que ha sido vivir la experiencia humana en el olvido de la esencia.

Ella tiene el conocimiento que estamos recordando al volver a la consciencia de lo que somos. Nada falta , nada sobra todo está ahí. 

Recordarnos es volver a la esencia, al origen y propósito de la experiencia aquí, reconociendo la vida en ésta dimensión y manifestando la presencia del creador en cada uno de nuestros actos.

Saber ahora lo que ha sido olvidarnos de lo que somos y darnos cuenta de que el objetivo de esta vida es aprender de todo, incluso de lo que no somos.


Amelia Camacho Guerrero.

18 febrero 2024.

Estados ascendidos de ser.


El estado de bienestar y tranquilidad que podemos vivir es el mejor indicio de que la consciencia se está manifestando en el diario vivir.

Hay cambios significativos que debemos observar con atención y reconocimiento porque son el resultado de muchos momentos de auto observación y de cuidado a lo largo del tiempo de transformación y de práctica del conocimiento que nos ha traído a este instante.

Muchos son los estados del ser que se van manifestando y no siempre pensamos que se deben a nuestro trabajo interior.

Hemos ido creando, aún sin darnos cuenta, estados del ser en consciencia pero que representan la comprensión que se expresa en la aplicación de lo aprendido en momentos donde la respuesta dejo de ser la reacción egoica para  ser la manifestación de la consciencia.

Nos puede sorprender el cambio. Podemos sentir que algo es diferente. Y si lo es. Ya no caemos en el arrebato de la inconsciencia o si lo hacemos lo corregimos rápidamente.

Esta rápida reacción es muestra de la consciencia que está presente para recordar su presencia.


Amelia Camacho Guerrero.

18 febrero 2024.

Amor, amor, amor ❤️💕


Celebrar el amor a cada instante de la vida es un propósito que pudiera parecer descabellado cuando existen tantas distracciones que invitan a la negatividad y al desencanto. Esto ocurre si vivimos en una línea de tiempo donde todos los eventos que destruyen la consciencia y la armonía son nutridos por la consciencia colectiva y dependen de la ignorancia y el abandono de uno mismo.

Crear una realidad proveniente del más elevado pensamiento y de la consciencia más alta dará como resultado vivir en amor.

Todos buscamos está maravillosa experiencia, todos queremos sentir el amor y conectarnos con el alma desde el corazón ❤️ lleno del deseo profundo de compartir tan sagrado regalo.

Esto es posible, lo podemos crear en nosotros mismos, es ahí donde se experimenta y desde donde se comparte y se expresa.  Así seremos los primeros en saborearlo , lo conoceremos y sabremos apreciar su presencia en la vida porque al sentirlo sabremos lo que ofrecemos y no buscaremos que alguien venga a darnos el tesoro que ya tenemos. 

Se convertirá entonces en lo mejor que podemos compartir, en el propósito cumplido de la experiencia espiritual que venimos a manifestar.

Amar con todo nuestro ser, como una hermosa tarea almica que disfrutamos y colma de armonia y felicidad a todos los que nos rodean.

Amar para aprender, para evolucionar, para compartir, para dar, para ser.

Es un propósito muy elevado, el que puede amar por encima de todo adquiere un nivel de consciencia que expresa una frecuencia vibratoria muy alta.

No hay nada mejor. Amar porque podemos.

Amar porque del amor nos alimentamos.

Amar porque es nuestra esencia.

Amar porque es lo que somos: amor.


Amelia Camacho Guerrero.

14 febrero 2024.

Frecuencia vibratoria.

Emociones y pensamientos determinan tu frecuencia vibratoria a cada instante.

Lo que asumes como verdadero es verdadero para ti.

Lo real es real para cada uno porque está sustentado en las creencias acumuladas a lo largo de la existencia. Ahí vivimos, en el interior de nosotros. Toda nuestra experiencia se construye y se experimenta adentro de nosotros.  Las percepciones de la realidad son matizadas por las emociones y sentimientos, sensaciones y pensamientos que determinan la frecuencia vibratoria que tenemos en cada momento de la vida.

Nada de esto es ajeno a nuestra participación. Las muchas impresiones que recibimos de manera permanente son los estímulos que producen la consciencia y que se manifiestan en las respuestas que damos a lo que vivimos.

Siempre tenemos una frecuencia vibratoria que responde al entorno y la circunstancia, al momento y emoción que generamos.

Es necesario recordar que nos relacionamos con frecuencias, todo es energía y vibración. 

Cuidar y mantener una vida en armonía y aceptación de la realidad circundante es un gran paso para aplicar el conocimiento y la comprensión del mismo.

Todo se refleja en la forma de vida. No es lo que sé, no es lo que hago con lo que sé.

Saber quién soy y que la convicción y certeza de ello me guíe en cada momento.


Amelia Camacho Guerrero.

13 febrero 2024.

Metanoia.


Esta condición de la mente se manifiesta en toda persona que, a través de su proceso de transformación, cambia su manera de pensar.

Cuando esto sucede , la comprensión del conocimiento y la práctica de las diversas percepciones y actividades que cada persona elige , producen una transformación que , muchas veces sorprende y hace que las acciones y la conducta habitual cambie. 

Este cambio se lleva a cabo en la mente, las creencias, las formas de comportamiento y pensamiento dejan de ser las habituales y las actitudes reflejan una manera distinta de  responder.

Es notable, cuando esto sucede, que la persona piense que los demás han cambiado pero no es así.  Al pensar diferente, se percibe también el entorno y a las personas de manera diferente.

Todo pareciera diferente y lo único que se modificó fuimos nosotros.

Podría pasar desapercibido el cambio pero día a día notamos los beneficios de esta transformación.

Al observarse internamente sabremos que ya no somos los mismos, ya no tenemos los mismos contenidos en la mente, hemos realizado cambios y hemos incorporado información y experiencia que ha despertado la sabiduría interior.

A muchas personas les da un poco de temor porque los allegados empiezan a sentirse incómodos y no comprenden que les pasa. No responden igual en circunstancias de discrepancia, o en momentos emocionalmente conflictivos y eso saca de balance a los demás.

Se encuentran confundidos y no entienden porque ya no actúas de la misma manera.

Si, tu consciencia cambio, ves de otra forma, piensas de otra manera, evolucionas, creces emocionalmente y te sientes más seguro de tí.


Amelia Camacho Guerrero.

5 febrero 2024.

Confianza en uno mismo.


Mucho habremos estudiado o leído para crear esa respuesta que en ocasiones pareciera muy difícil de tener.

Las sugerencias varían y abundan, las ideas también . Tal vez la hemos buscado con el apoyo y el respaldo de personas que amamos, tal vez le hemos pedido a a una fuerza superior que nos la conceda,  o hemos recurrido a procesos de estudio y análisis intelectual para entender como lograrlo.

Todo ha salido bien y sin embargo no ha dado el resultado deseado. Nada ha sido inútil.  Cada paso no ha acercado al encuentro con ese propósito.

Al conocernos, al darnos mayor aceptación, al reconocer y reencontrarnos con nuestra esencia también nos encontramos con el poder interior que fortalece y nutre la verdadera identidad que nos hace sentir las virtudes del ser que somos. 

Ahí reconocemos lo que siempre ha estado presente y no veíamos. Es en nuestro interior que está la confianza, la fe, la certeza, el respeto, el amor, la alegría, la felicidad y todo lo que habíamos buscado en otras personas, en otras manos, en otras fuerzas.

Nunca, nada de todo esto, estuvo fuera de nosotros. Hemos vivido afuera y de todo lo exterior. Por eso creímos que solo de afuera vendría lo que más deseamos.

Nunca fue así.

Hoy la verdad de nuestro ser se expresa para darnos las respuestas y hacer que seamos conscientes del tesoro que poseemos, de hacernos responsables de manifestarlo y de cuidarlo para que llene los espacios que ocupemos y para que esas elevadas frecuencias se sintonicen con otros que también buscan está verdad de su ser.

El camino es personal y cada uno llegará a su tiempo. La comprensión tiene diferentes ritmos para todos. Es por medio de ella que accedemos a niveles de consciencia diferentes.

No es la mente, no es solo la información, no es la rutina de ceremonias ni ejercicios, es el alma y el corazón unidos con la consciencia y el ser que nos dan ese resultado.

Todo es útil y solo tu sabrás cómo recorrer ese camino.


Amelia Camacho Guerrero.

3 febrero 2024.