Mi relación con mi cuerpo.


No es el cuerpo un aspecto de nosotros mismos que haya ganado nuestra atención y completa aceptación desde siempre 

La realidad es que es un punto de fricción y de identificación muy importante para nuestra transformación personal.

Todos en algún tiempo de la vida hemos visto al cuerpo con rechazo, descuido, falta de respeto y aceptación por la profunda ignorancia en la que hemos vivido.

Si pudiéramos hacer una recopilación de observaciones y detalles de los cuales hemos renegado, nos daríamos cuenta de todo el amor que  le negamos.

Si bien somos un espíritu viviendo una experiencia humana, la manifestación del creador en este plano, la luz dentro de un cuerpo; no hemos tenido el reconocimiento y valor por tener un vehículo para poder cumplir con el propósito de manifestar el cielo en la tierra 🌎.

Sin el cuerpo no podríamos estar experimentando todo lo vivido, sintiendo la amplitud de sensaciones y de placeres que conocemos. Es la casa de tu alma. Es la oportunidad de conocer este lugar.

Es un deleite vivirlo en un cuerpo que nos ofrece tantas oportunidades tan excepcionales.

La consciencia es lo que facilita que veamos con aprecio y atención el vehículo en el que habitamos. 

Gracias a el estamos descubriendo el mundo y sus ofertas, podemos ampliar el conocimiento de muchas áreas de la vida.


Amelia Camacho Guerrero.

7 julio 2024.

El circulo de mujeres.


Está maravillosa actividad concluye el sábado y se cierra un ciclo que se abrió con entusiasmo y propósito de integración de las energías masculina y femenina en cada una .

Fluyó con interés y participación comprometida de todas las integrantes.

Estos grupos nutren y fortalecen la consciencia y el autoconcepto de todas. La forma en que este soporte se mantiene es el resultado del crecimiento en la consciencia de cada mujer , recuperando su presencia y su poder interior para manifestarse cada vez con mayor seguridad y confianza.

Este vínculo no se acaba, se transforma en consciencia y amor ❤️ por una misma y por todas.


Amelia Camacho Guerrero.

2 julio 2024.❤️

El consumismo.


Consumir es una condición de la vida cotidiana debido a la manera en que la sociedad se ha ido desarrollando.

Reglas , condiciones, leyes, normas que en todos los ámbitos han existido para determinar la conducta del ser humano, incluyen la atención hacia afuera, donde todo se presenta de maneras infinitamente atractivas para que no prestes atención a tí.

Se consume de todo. Y sin preguntarte caes en las trampas de la mercadotecnia y de la oferta de productos que muchas veces ni siquiera necesitas.

Todo resulta atractivo e invitante al consumo variado de satisfacción de los sentidos. La búsqueda del placer se convierte en un objetivo importante.

Ser capaces de descubrir que es lo que nos nutre, de que nos alimentamos,  será muy interesante para revisar el tipo de energía que consumimos y cuál es la frecuencia vibratoria que expresa nuestro cuerpo.

La acumulación de objetos, de alimentos, de información, de ropa, de posesiones adquiere una significación importante cuando sirve para nutrición de la identidad personal.

Salir de esta rutina equivale a la liberación de rutinas equivocadas que nos alejan de la consciencia de nosotros para desarrollar el interés por conocer a nuestro ser y soltar la falsa identidad que alimentamos.

Todo lo que nuestros sentidos perciben es lo que nos nutre. De ahí que elegir las impresiones que preferimos se convierte en un acto de consciencia.

Buen alimento en todos sentidos.

No solo lo que entra por la boca.

Todo lo percibo, lo interpreto y lo significó y es con lo que constuyo la realidad que vivo.


Amelia Camacho Guerrero.

2 julio 2024.

Manifestación del ser.


Podrías pensar que para que tú ser se manifieste habrá que aprender diferentes técnicas o hacer algo que requiera de un profundo apoyo externo.

Ser es más fácil de lo que puedo imaginar.

Ya somos lo que somos. No hay que aprender a ser. La gran tarea es reconocer lo que somos.  Y luego de eso solamente serlo.

Por supuesto que ese divino ser ha sido encubierto y disfrazado, protegido con tal eficiencia que llegó a ser desconocido para uno mismo.

Ahora hay que descubrir, quitar tantas y tantas protecciones que eso es lo que obstaculiza su encuentro.

Vivimos con tal ignorancia de lo que somos y de las razones que nos condujeron a esta condición , que ahora pensamos que sería muy complicado lograrlo.

Conocernos es ir quitando las capas que cubren nuestra verdadera identidad. Por eso cada aspecto de la ignorancia que descubrimos da luz a un aspecto del ser que somos.

Así vamos cambiando la percepción que tenemos de nosotros mismos y reconocemos lo que no somos, lo que hemos creído que éramos y surgimos con nuestra identidad verdadera.

Ahí estará nuestra atención para fortalecer con consciencia y verdad el conocimiento de nuestro ser.

Reconocernos con virtudes que creímos tendríamos que aprender, que pensamos que sería difícil expresar para darnos cuenta de que son y han sido nuestra identidad y que hay que reconocerlas y manifestarlas en cada acto de nuestra vida.

Ser es más sencillo que no ser.

La base , el fundamento de esta acción, es y será la consciencia que que tenga del ser que Soy.

Creer en lo que Soy, no solo saber lo que soy, serlo de verdad y expresarlo en cada uno de los actos de mi vida.


Amelia Camacho Guerrero.

2 julio 2024.

Concentrarse en el reconocimiento del ser.


Una acción de beneficio para nuestro desarrollo,es concentrarse frecuentemente en el reconocimiento del ser que somos.

Es fácil saber que Soy la manifestación del creador en este plano, que soy la divinidad disfrazada de humano y que Soy un espíritu viviendo una experiencia humana, pero debo, más que saberlo, reconocerlo cada día para poder manifestarlo con certeza, con convicción y determinación.

Expresarlo cada día, cada momento, cada pensamiento , cada emoción para tener presente y hacerlo, todo el tiempo.

Esto traerá a la vida una transformación impresionante porque enaltece la consciencia y la realidad que vivimos será una verdadera creación producto de la verdadera identidad que se que Soy.


Amelia Camacho Guerrero.

24 junio 2024.

La plenitud de vida.


Vivir en plenitud es un objetivo para muchos seres humanos, tener un estado interno que nos permita estar cada vez más completos y ausentes de conflictos internos .

La plenitud en la vida la saborean los que , en consciencia de su infinita abundancia son capaces de disfrutar y gozar todo lo que les rodea y todo aquello que son capaces de apreciar en sí mismos.

Tener la visión clara para percibirse en plenitud, es un paso gigante que observa una consciencia desarrollada, una consciencia que ha alcanzado a comprender la esencia de la vida y el objetivo primordial de la existencia.

Sentir la plenitud del ser, equivale a vivir en amor, a vivir en la consciencia que ofrece el conocimiento del ser que somos y a saber que la experiencia humana es una experiencia de aprendizaje , de creación y de recuperación de la identidad real que olvidamos al inicio de esta aventura.

La plenitud es un estado de consciencia, de bienestar ,de confianza, de gozo, de felicidad, de fé, de alegría que llena el corazón y transforma la vida.

La existencia se llena de toda la sabiduría ganada, de todo lo que hemos vivido y experimentado y básicamente de amor que es la más elevada consciencia que, ahora conocemos, porque ya no existe la manifestación egoica, que se atraviesa en el camino distrayendo nuestra atención hacia nosotros mismos.

Es trascendente poder percibir esos momentos de plenitud y no pasar por alto la experiencia que nos regalan, hay que detenernos y sentirlos, vivirlos y saber que somos los creadores de esa realidad y podemos manifestarla  siempre.


Amelia Camacho Guerrero.

24 junio 2024.

Libertad de expresión.


La libertad es un valor que se vive y que se desconoce en profundidad porque abarca muchos aspectos de su manifestación .

Se lucha, se discute, se exige y pocas veces se toma la responsabilidad de su significado.

Ser libre para expresar lo que uno es, para manifestar el origen y la vida de cada uno, para sentir, para ser conscientes de lo que significa la libertad del ser, no es tan fácil porque nunca se piensa en ello .

La reflexión ahora es en lo que concierne a la expresión del ser y que no se refiere solo a hablar.

La libertad de expresión se ve limitada por la ignorancia de uno mismo.

Aprendimos a pedir permiso para hacer muchas cosas. Aprendimos a complacer y satisfacer a la opinión de los demás y también a creer que no teníamos libertad.

Creímos que teníamos que luchar para que alguien más aceptara que podíamos ser libres.

No aprendimos nada acerca de la responsabilidad de saber manifestar que nacimos libres y que habíamos de ser conscientes de ello.

No conocernos ha sido muy dañino y eso ha impedido que aprovechemos la fuerza de la consciencia para hacernos cargo de la expresión tan amplia que podríamos compartir.

Expresión que daría apertura a la creatividad que de manera natural poseemos.

Expresión intelectual, emocional, motriz, instintiva y sexual.

Si reflexionamos sobre estos aspectos tal vez nos sentiríamos muy limitados por no poder reconocer lo corta que es la expresión en nosotros.

Hay mucho por manifestar, por dejar salir, todo está muy contenido y retenido dentro de nosotros y a la vez vivimos en la ilusión de vivir en una libertad falsa.

El ser es enormemente rico en expresión y  es hasta que lo podemos reconocer ,que descubrimos el inmenso potencial escondido.

Reconectar con el corazón para volver a la esencia y ahí, desde ahí , hablar, sentir, crear, disfrutar, dar y recibir las bondades de la libertad de ser.


Amelia Camacho Guerrero.

24 junio 2024.

Necesidades prioritarias.


Las necesidades se definen como algo que es imprescindible de atención.  Así aprendimos a ver que la sobrevivencia nos exige muchas cosas para mantener la vida.

Nacer, crecer, reproducirse y morir se reconoce como un proceso natural y lo que requiere este camino se establece como el propósito de la vida humana.

Debido a este enfoque , gran cantidad de personas se quedan en esa etapa: la sobrevivencia.

Esto hace que toda la energía se entregue a objetivos y propósitos para hacer y lograr , lo que nos ofrezca un lugar reconocido en el mundo externo. Importa mucho el que dirán, todo lo que los demás vean, la apariencia y las pertenencias materiales, las cosas tienen un significado que nos aleja del ser que somos.

Así aprendimos a ver la vida y a ver lo que somos. 

Los esfuerzos para lograr tener una representación en el mundo son muchos y absorben la atención en cualquier otra dirección.

Se depende de la aceptación de los demás y se sufre mucho cuando no se obtiene.

Darse cuenta de que las necesidades fundamentales del ser son muy diferentes es indispensable para descubrir que no nos hemos podido dar cuenta de lo que verdaderamente necesitamos.

Conocernos, reconocernos, aceptarnos y amarnos es la base del despertar de la consciencia de lo que somos.  Eso nos ayuda a manifestarlo y a ser esa esencia que crea y expresa su realidad en todos los actos de su vida.

Puede parecer muy simple, pero no lo es.  Aquí saber, entender y comprender son la clave.  Sabemos infinidad de cosas,  entendemos muchas menos y comprendemos muy pocas.

La comprensión es la diferencia y es la única que nos conduce a un verdadero cambio.  Somos lo que comprendemos.

Salir de la ilusión del saber y vivir la experiencia de la comprensión nos lleva a la sabiduría ganada por consciencia.


Amelia Camacho Guerrero.

18 junio 2024.


El trabajo de ascencion.


Toda la observación que hacemos para conocernos, reconocernos, aceptarnos y amarnos es el camino al cambio frecuencial que queremos experimentar.

Nada existe afuera, todo está en el interior y los cambios serán perceptibles en nuestro entorno.

El cambio de frecuencia es el cambio que hacemos al recordar nuestro origen y nuestra esencia. El ser que somos y que se expresa en todo lo que experimentamos.

Confrontando todo lo que hay en el interior de nosotros mismos seremos capaces de descubrir mucho más de lo que somos, mucho más que hemos ocultado y mucho más de lo que imaginamos de nosotros mismos.

Lo que somos y lo que reconocemos es diferente. A veces creemos que lo visto es aceptado y la realidad es que lo seguimos negando o lo seguimos expresando mecánicamente. 

Saber algo es muy diferente a reconocerlo y aceptarlo.

El saber de lo que estamos hablando es  comúnmente mencionado y es una ilusión que hace creer, a quien lo dice, que ese saber es el despertar de la consciencia.

Acumular información, memorizar datos o referencias de pensadores, filósofos, escritores o personajes que nos describen el proceso evolutivo del despertar no es el camino que nos conduce al interior de nosotros mismos, para ver,  lo que solo ahí podemos encontrar y hemos buscado afuera .

Trascender las creencias de lo que significa ascender, soltar las ideas limitantes que han impedido que vayamos hacia adentro, soltando emociones y cambiando la manera de pensar ya es estar en la dirección correcta.  Toda la visión de la vida cambia y se experimenta la armonía en el interior aun y cuando el escenario externo este en desorden.

Ascender es trascender.


Amelia Camacho Guerrero.

18 junio 2024.



La tolerancia en la vida diaria.


La característica de la que hablaremos es algo constante en la experiencia individual.

¿ Quien no se desespera cotidianamente por cualquier evento, conducta o respuesta de otra persona, por que algo se sale de control, porque algo no es como la persona quiere?

También es frecuente vivir la intolerancia ante nosotros mismos y desesperarnos fácilmente frente a los momentos en que estamos viviendo falta de aceptación. La discriminación es un factor de rechazo e intolerancia. 

Todo aquello que no aceptamos de nosotros mismos es un motivo de intolerancia. Peleamos constantemente con nosotros mismos por aquello que no aceptamos.

La tolerancia no es algo común en la conducta humana, vemos como algo natural el quejarse y rechazar lo que no nos gusta.

Tolerar significa respeto, aceptación de las diferencias, reconocimiento al otro y a uno mismo.

Manifestar la tolerancia es un acto de consciencia que se siente y se expresa en la realidad, en la vida diaria.

Es un proceso de descubrimiento de nuestras propias características el detenernos a observar lo que provoca esta respuesta.

Lo que se esconde detrás de la intolerancia es revelador.

Que tanto queremos ver al poner atención en esto.


Amelia Camacho Guerrero.

10 junio 2024.