Un día especial que nos permite agradecer lo mucho que hemos recibido y la cantidad de bendiciones y beneficios, que muchos, nos han ofrecido y siguen ofreciendo cotidianamente.
Tiempo para reconocer y entregar a todos los que nos ayudan y comparten la riqueza de sus almas con nosotros, el acto sagrado del agradecimiento.
Darnos tiempo para una profunda reflexión, una detenida observación minuciosa para recopilar los momentos de generosidad de todos los que nos acompañan en este camino.
El agradecimiento nace del amor y la consciencia que valora lo que recibe y es la forma en que se alimentan las almas.
Agradece con la generosidad con que recibes. Agradece en forma abundante. Agradece espléndidamente. Agradece siempre y oportunamente.
Nunca pierdas la oportunidad de decir gracias desde lo más profundo de tu ser .
Agradece , no por costumbre sino por amor.
Amelia Camacho Guerrero.
27 noviembre 2019.