Todo sobre nosotros mismos.

Si bien hay muchas distracciones en el mundo y todas ellas atraen nuestra atención, hoy, todo nos invita a volver al espacio interior donde se manifiestan las respuestas que damos a las infinitas impresiones que día a día y momento tras momento recibimos.

Uno de los alimentos que consumimos son las impresiones y nuestros sentidos captan muchas de ellas sin que nos percatemos de que son un alimento del cual estamos nutriendo el mundo personal e internamente hemos de digerir y procesar adecuada y oportunamente.

Al ignorar que son alimento no les damos el tiempo suficiente para la asimilación y digestión.   Mucho de lo que nos incomoda y no permite que estemos en paz, es justamente esto.

Podemos estar pensando algo o recordando un evento por algún tiempo sin alejarlo de nuestra atención porque aún no lo hemos procesado adecuadamente.

¿ Que significa esto ?  Que cada impresión ha de ser masticada, tragada y digerida como se hace con el alimento.

El alimento no digerido causa malestar y termina por ser rechazado o nos enferma. De igual manera las impresiones llegan a enfermar, la mente, las emociones y transtornan el comportamiento y las respuestas ante la vida.  

Esta falta de digestión genera resistencia, lucha, negación, coraje, ira, tristeza, dolor, preocupación, frustración, etcétera.

La aceptación es un paso fundamental para esto. Observar donde ponemos la atención, aquello que tiene interés para nosotros, lo que nos nutre cotidianamente, lo que ocupa nuestra mente mayormente, es ahí en donde estamos.

Saber dirigir la atención conscientemente hacia aquello que nos nutre y beneficia es fundamental.

Muchas veces un evento ocupa nuestro pensamiento por mucho tiempo y no nos damos cuenta de que se nutre de energía, nuestra energía y no logramos desprendernos de esa idea.   Detrás de ello hay desconocimiento de la importancia que hay en observarnos y analizar que nos mantiene ahí. 

Seguramente encontraremos falta de aceptación a la realidad que se nos presenta y tal vez convertimos en problema algo que es un hecho, esto es buscar solución a algo que solo hay que aceptar.

Muchas veces nos preocupamos por cosas que no se solucionan y no desgastamos inútilmente. El evento se acepta y las consecuencias se atienden con soluciones que nos conducen a mejores estados de consciencia.

Un hecho no se altera pero nuestra percepción de él si.

Es nuestra tarea actual comprometernos con el bienestar interior, dedicar tiempo a nosotros mismos y dirigir conscientemente nuestro mayor compromiso al cumplimiento de la entrega en amor y al crecimiento del ser que somos.

Todo nos coloca frente a situaciones para avanzar en el desarrollo humano y hay infinidad de momentos para lograrlo. No hay un solo momento en nuestra vida que no nos ofrezca esa oportunidad.

Las circunstancias pueden variar pero no hay una sola persona exenta de oportunidades para vivirlo, eso es la experiencia humana.


Amelia Camacho Guerrero.

28 junio 2022.