Suerte ?, Fortuna ?, Casualidad ?, Causalidad ?

¡¡ No !! Solo sincronía. Ya que todo es energía y ésta se manifiesta en frecuencias vibratorias, todo responde a las leyes cósmicas que rigen el universo.

La ley de vibración, la ley de correspondiencia son las maneras en que éstas leyes se expresan.

Nuestros actos y experiencias responden a las sincronía con las frecuencias que cada circunstancia tiene, las personas emanamos una frecuencia que se sintoniza con lo que le corresponde.

De esta manera nada está fuera de la ley que le corresponde.  Por ello, eso que a veces repetimos mecánicamente, como que siempre estamos en el lugar correcto y con las personas correctas puede ser comprendido bajo el conocimiento y comprensión de las leyes fundamentales del universo.

Todo encuentro, toda relación, está respondiendo a la frecuencia que le corresponde. Nada sucede por casualidad.

Por eso podremos comprender lo importante de tener una vida armónica y plena que nos permite experimentar la creación de la realidad que deseamos.

Conocernos ampliamente, aceptarnos en todas las formas posibles, es necesario para expresarse en una vibración más alta.

Al tener consciencia de uno mismo vivimos en la responsabilidad de lo que somos, hacemos y pensamos generando coherencia y armonía con todo lo que nos rodea.


Amelia Camacho Guerrero.

17 julio 2020.