Indudablemente aprendemos muchos significados equivocados a lo largo de la vida, sin darnos cuenta, por supuesto. Tampoco sabemos lo que esto implica. Uno de ellos es el significado de la palabra "responsabilidad", y a ella , como a tantas otras les impregnamos una carga emocional que no contiene el verdadero significado que tiene.
Tener una habilidad de respuesta es tener responsabilidad y sin embargo le agregamos , dificultad, conflicto, carga, molestia, etc., así generamos toda la tensión que el cuerpo acumula al realizar las tareas que nosotros elegimos. Exponernos a cosas nuevas es siempre una oportunidad de aprender y descubrir nuestros talentos y los nuevos entornos y circunstancias nos dan esa opción.
Los cambios que en múltiples ocasiones vivimos, son eso, y a través de ellos hemos ganado la experiencia que acumulamos día a día. Cambiar este significado nos ayuda a disfrutar el aprendizaje que se nos ofrece. Hacer siempre lo que hacemos con el disfrute y el gusto de ganar mas habilidades evitaría que nos sintiéramos tan cansados y agobiados. Nuestro cuerpo acumula lo que pensamos de lo que hacemos y es común oír que lo genera los estados de ánimo negativos, los dolores corporales, el cansancio, el hartazgo, los conflictos ya sean familiares o laborales, están producidos por lo que hacemos o por aquello a lo que nos dedicamos.
Cada cosa que realizamos tiene un significado personal. Puede ser que ni cuenta nos hayamos dado de lo que significa para nosotros y al no saberlo, no nos percatamos de lo que un significado equivocado produce en nuestras acciones. Así como lo significamos , así lo vivimos. El significado está en todo lo que hacemos. De tal manera que si pensamos que el trabajo es una monserga, así lo vivimos; si por el contrario sabemos que es el medio para lograr los ingresos económicos necesarios o el medio para disfrutar lo que sabemos, lo que nos gusta hacer o la actividad que permite que seamos útiles y aportemos algo a los demás, esto tendrá otros resultados, porque además nos pagan por ello. Mayormente se busca obtener satisfactores como : el reconocimiento personal, la aceptación de los demás, el aprecio de los que nos rodean, de algo que solo es un medio económico de sobrevivencia y por tanto cuando esto no llega , la frustración y el desencanto afectan de manera personal afectando el rendimiento por no lograr los incentivos deseados.
Conocernos y darnos la atención que necesitamos nos libera de poner en otras manos lo que no pueden darnos, de generar expectativas para obtener de un trabajo o una tarea lo que es nuestra propia responsabilidad. El trabajo es nuestra elección y nuestra respuesta a él también lo es. Nadie puede cumplir nuestras expectativas. Nosotros sí.
Amelia Camacho Guerrero.
21 Julio 2014