La incertidumbre no está ausente en esta condición. El regreso a las actividades laborales se presenta con muchas dudas, con muchas preguntas y poca claridad.
Estamos acostumbrados a las certezas a las cosas claras y a las respuestas que nos ofrezcan seguridad.
Hoy no hay nada de eso.
Las reglas del juego cambiaron muy drásticamente, de la noche a la mañana todo es ya muy diferente.
Volver a nuestras áreas de trabajo será totalmente diferente.
Las condiciones actuales proponen tiempos de actividad en casa o en la oficina o en algo que tal vez no se haya experimentado antes.
Todo es nuevo. ¿ Yo soy nueva también ?
¿ Mi mente está lista para los cambios ?
¿ Emocionalmente como me siento con todo esto?
Tal vez nada vuelva a ser igual. Más vale aceptar y fluir sin resistencia a lo que ya está frente a nuestros ojos y no podemos cambiar.
Estamos aprendiendo lecciones muy novedosas, son retos y desafíos que nos ayudarán a conocernos y a valorarnos.
Aprovechar el confinamiento para fortalecer nuestro interior y prepararnos para el tiempo que viene, afianzar el conocimiento y la comprensión de lo aprendido para tener la fuerza y el poder para continuar en el proceso evolutivo con aceptación y armonía son objetivos para tener en cuenta.
Amelia Camacho Guerrero.
4 mayo 2020.