Miedos Inventados.

Reconocer los miedos a los que nos esclavizamos, es parte de la observación a nosotros y es en el interior donde estos viven y se nutren de la energía que esta destinada al objetivo de crecimiento y evolución del hombre.

Los miedos nacen en la mente y surgen de una percepción equivocada de uno mismo y del desconocimiento de las capacidades personales y la fuerza interior que siempre nos asiste.

Los miedos inventados son intangibles ,invisibles y se convierten en una solicitud de experiencia, es una petición interna, que , en la repetición constante de esa idea hacemos que se manifieste en la realidad que se vive.

Todo esto tiene el inconsciente propósito  de ayudarnos a recordar quienes somos y a  enfrentar la responsabilidad de saber que son una creación propia producto de la ilusión de separación de nuestro centro.

El miedo al rechazo, a no ser aceptado, a no ser amado, a vivir en soledad, a la enfermedad, a la incapacidad física, a la muerte, al desamparo, a la soledad, a la escases económica, a la carencia de cualquier cosa, étc., étc., son algunos de los miedos con que se alimenta el inconsciente colectivo. Estos miedos se comparten , se contagian, se aprenden al vivir en la inconsciencia.

Por supuesto que hay miedos reales a situaciones tangibles, visibles que con ayuda del natural instinto de supervivencia se afrontan para ser superados obteniendo la experiencia necesaria.

Hacernos conscientes de ellos y de la forma en que el pensamiento sostenido en esa atención los crea, facilita evitar nutrirlos.

Reconocerlos aceptarlos y ver porque y para que les damos existencia es avanzar en el desarrollo interno.

Nuestra capacidad creativa es poderosa, tan poderosa que puede destruir toda posibilidad de felicidad y logro de paz interna, pero también construye y eleva toda forma de vida.

Cada miedo trata de romper paradigmas y barreras que nos separan de nuestro interior, de dependencias y apegos a situaciones que limitan el ejercicio del poder creativo en favor del crecimiento en consciencia y así tener la calidad de vida del Ser que somos.


Amelia Camacho.

Julio, 2013.