La sombra existe , como también existe la luz. Las partes luminosas de nuestra psique y las partes oscuras son un todo que vale la pena conocer. No pelear con ella es una buena decisión, hay que verla y aceptarla, reconocerla y darnos la oportunidad de crecer ante su conocimiento. Todos tenemos una, todos la proyectamos de diferente manera. La inconsciencia nos facilita esconderla pero para la consciencia no hay nada oculto.
Reconocernos ante lo que mas juzgamos es darle la cara a esa sombra que nos revela lo desconocido en cada uno.
A mayor inconsciencia mas fuerza tiene la sombra.A mayor negación menos crecimiento.
Hay que hacer las paces con todos nuestros sentimientos. Reconocer nuestras deudas emocionales con el pasado, que son eventos que dejan sentimientos ocultos que nos es difícil aceptar y mantenemos escondidos por el dolor que nos provocan. Sentir lo que hay y reconocerlo como parte de uno, como forma de aprender y crecer en el desarrollo psicológico que favorece cambiar de actitud ante la vida y sus eventos.
Amelia Camacho Guerrero.
20 Enero 2015.