La Palabra. Krishnamurti.

Para comprender cada experiencia, cada estado de la mente,< lo que es >, el hecho real, la realidad, uno no ha de ser esclavo de las palabras. Al enunciarla, la palabra hace surgir distintos recuerdos, y esos recuerdos se ponen en contacto con el hecho, lo controlan, lo conforman, le dan una dirección al hecho, < a lo que es >.


Las palabras son un medio de comunicación, pero si determinadas palabras nos producen una reacción psicológica o neurológica, entonces se hace muy difícil comunicarse..


Cada palabra, cada pensamiento, moldea la mente; y al no comprender cada pensamiento, la mente se hace esclava de las palabras y comienza el sufrimiento.


Ha de ponerse fin a todo tipo de imagen, de palabra, de símbolo, para que pueda florecer la meditación(...), pero el hábito de la palabra, el contenido emocional de la palabra, las implicaciones ocultas de la palabra, impiden la liberación de la palabra. Sin esta liberación uno es esclavo de las palabras, de las conclusiones y de las ideas.


La palabra Dios despierta todo tipo de reacciones neurológicas y psicológicas, y nos sentimos satisfechos.


Esto es lo que entendemos por conocimiento psicológico. Es decir , he acumulado, psicológicamente, una gran cantidad de información sobre mi esposa o mi novia. He acumulado este conocimiento sobre ella de forma correcta o incorrecta, dependiendo de mi sensibilidad, de mi ambición, codicia, envidia, y todo eso, dependiendo de mi actividad centrada en mi mismo. De modo que ese conocimiento impide la observación real de la persona, que es un ser vivo. Nunca quiero enfrentarme a ese ser vivo, porque tengo miedo. Es mucho mas seguro tener una imagen de esa persona que ver al ser vivo.

Del Libro :  SER HUMANO de Krishnamurti.  Editorial EDAF.


Amelia Camacho Guerrero. 

21 Marzo 2015.