El poder de creación que tiene la palabra es, para los seres conscientes, la manifestación clara de un poder interno que hace que la realidad sea la obra de arte que día a día es expresada con la vibración de la voz y los vocablos que se emplean, es como el canto personal que un ser emite cada vez que habla. Es la frecuencia que su consciencia tiene al darse cuenta de lo que crea al usar este maravilloso instrumento que es, su voz.
Hablar conscientemente cuidando la creación, no porque se oiga bien, no por temor al juicio externo, no porque sea lo conveniente o porque está de moda, sino porque es producto de la expresión del ser humano que sabe que su palabra crea una realidad en todo momento.
Tener esta consciencia ayudaría a que todos pusiéramos atención en lo que estamos creando cada vez que criticamos, nos quejamos o hablamos sin saber nada de lo que decimos. Crear lo que queremos ver manifestado en nuestra vida, colaborar con pensamientos creativos y correctos para nutrir la vida de todos participando y educando con nuestra expresión consciente siempre y en todo momento.
Hablar para crear. Hablar es también confiar en la sabiduría y la fuerza que la frecuencia vibratoria del sonido de nuestra voz crea en la realidad que cada uno le imprime. Hablar para manifestar lo que queremos vivir.
Hablar expresando los estados de nuestro ser para disminuir los efectos de la ignorancia y el sueño de la inconsciencia en la vida de la humanidad.
Reflexiona sobre lo que dices para hacerte consciente de lo que creas, porque esa es la realidad que vives.
Amelia Camacho Guerrero.
19 noviembre 2018.