Si una mujer se conoce y sabe quien es, eso será lo que proyecte y manifieste en todo lo que le rodea. El conocimiento de sí no se puede ocultar porque será la expresión de su ser. La consciencia adquirida es su fuerza y su impulso. Una mujer así se reconoce por su valor, por su presencia y su gran capacidad en lo que hace, piensa, dice y siente.
Hace manifiesta no solo su belleza también su inteligencia, su intuición, su fuerza interior, su alegría, su magia.
Toda mujer es valiosa, toda mujer es capaz, le digan lo que le digan, de hacer de su vida todo lo maravillosa que la quiera, basta con que use todo su poder y la fuerza que siempre le asiste.
Amelia Camacho Guerrero.
7 Marzo 2016.