Leer ha de ser un placer que se cultive a lo largo de la vida. Se leen y se oyen continuamente mensajes que nos invitan a realizar esta actividad y sin embargo no siempre atendemos a esta sugerencia. Realmente puede ser que no nos demos cuenta de lo que aporta una buena lectura. Y por buena lectura hemos de entender , aquella que nos agrada , la que seleccionamos por el interés que nos provoca, la que nos dice algo que queremos saber, la que nos recomienda alguien que nos conoce y sabe de nuestros intereses, la que nos llena de del alimento intelectual y nos deja satisfechos, la que nos aporta cultura y formas de comunicación diferentes, la que nos divierte y enseña.
Esto por supuesto no sucede con las lecturas obligadas , las que por alguna razón se nos imponen, las que hacemos por cumplir con algo y solo llenan un tiempo para mas tarde olvidar.
Leer y saber leer es ya un logro. Querer leer es un placer. Buscar este alimento es uno de los mas ricos y deliciosos manjares: nutre el alma , el corazón y la mente.
Si no se ha cultivado este hábito, vale la pena empezar. Nunca será tarde para hacerlo. Las librerías son lugares llenos de magia. Ellas nos ofrecen muchas oportunidades para conocer otros pensamientos ,otras ideas, múltiples formas de encontrar en otras voces nuestra propia voz, nuestro propio pensar.
Oportunidades, ¡ hay muchas !, formas de conseguir libros también, no siempre tenemos que comprarlos. Eso sí , si te prestan un libro, respeta el valor que tiene y devuélvelo a su dueño. Los libros son tesoros que se comparten. Proponte leer en tus tiempos libres jamás te arrepentirás de hacerlo.
Amelia Camacho Guerrero.
28 julio 2014.