Fuera simulación y fingimiento.


Todo lo aprendido durante el tiempo de aprendizaje nos da ahora la oportunidad de aplicar lo que hayamos reconocido como una verdad en nosotros.

No es momento de dudar en lo que sentimos ni en lo que resuena fuertemente en el interior de nuestro ser.

Cada uno ha descubierto verdades fundamentales que han producido cambios en la forma en que vemos la experiencia de nuestras vidas. Cambios que han transformado conductas y actitudes, respuestas que ya no concuerdan con antiguas maneras de vida.

Vemos con otros ojos, la mente percibe e  interpreta con otros elementos. La consciencia se ha expandido y se expresa con otras palabras, con otras ideas, con los dones que el espíritu que somos empieza a desarrollar como su real identidad.

Actuaremos con la verdadera y natural manifestación de lo que queremos vivir. Ya sin caretas, sin armaduras de protección egoica, sin la necesidad de fingir o simular nada. Siendo honestos, siendo leales a nosotros mismos. Reconociendo nuestras emociones y sentimientos y dando oportunidad a la consciencia de que reconozca lo que ha vivido oculto en nosotros.

Estamos dejando ir la simulación, lo falso , avanzamos en la aceptación de lo que reconocemos en cada uno y sin juicios ni censura abrazamos cada aspecto de lo aprendido y su razón de ser.

Nos vemos en nuestro proceso evolutivo y nos damos cuenta de que todo ha sido para llegar a el punto en que nos encontramos.

Podemos ahora reconocer el gran aprendizaje y la creación de experiencia que logramos haciéndonos responsables de cada situación y de cada vivencia.

Sabemos, hoy, mucho más de lo que pudimos haber imaginado.  Nos vemos y nos acercamos cada vez más al ser humano que ha transitado por una historia que nunca pensó que era creada por uno mismo.

Podemos sentir respeto y admiración, aceptación y amor, alegría por descubrir la grandeza de expresión de la divinidad que habita en el cuerpo que ocupamos.

Somos y podemos ser lo que somos con la consciencia de ello.

La vida parece diferente, las personas que nos acompañan parecen diferentes tambien y realmente lo único que cambió es la consciencia que se abrió para que tengamos una visión enorme de nuestra existencia.

Amamos la vida y la honramos gozandola y disfrutando cada instante, sintiendo amor por nosotros y por todo lo que nos rodea.


Amelia Camacho Guerrero.

23 mayo 2022.