Todo en este tiempo , nos conduce a la confianza en nosotros mismos. Nadie puede ayudarnos a crecer y a evolucionar por encima de nuestra voluntad.
El poder interior ha de reforzarse mediante el reconocimiento de la real y verdadera identidad. Recordar de donde venimos, lo que somos y lo que sabemos es el camino para conocernos y reconocer la fuerza que habita en nosotros mismos.
Tomar en cuenta la información que desde hace mucho hemos estado escuchando que nos dice verdades que repetimos sin comprender, hará que ahora tengan sentido para aplicar en el tiempo de responsabilizarnos por un proceso que estamos viviendo.
Nadie podrá llevarnos a un estado de presencia, de consciencia, de crecimiento, de evolución porque nadie puede tomar decisiones que solo nos corresponden a nosotros.
El maestro interior es el que sabe lo que somos y lo que podemos y queremos, confíar es la consigna actual. Nadie nos dará lo que solo nosotros podemos obtener en nuestro proceso de asencion.
Muchas ofertas existen para despertar la consciencia, para abrir el tercer ojo, para activar la Kundalini, para descalcificar la pineal y así etc., etc., nadie puede hacer lo que tiene como base el trabajo personal y el desarrollo interior que tiene acciones que nadie puede realizar por uno mismo.
Es tiempo de introspección y profundidad, de reconocimiento y aceptación del poder interno que con la voluntad y confianza se logran cuando el ser toma el mando y nos conduce a un cambio de actitud y de forma de pensar que modifica la vida y la percepción de la realidad.
Nada se parece a ser lo que somos, nada es igual a ser dueños de nuestra vida y de nuestras decisiones, no hay mayor libertad que la de sabernos capaces de crear y vivir conforme al amor por nosotros mismos.
Hablamos de fé, de confianza, de fuerza, y es hora de manifestarla en cada acto de la vida. Podemos hacerlo porque el maestro interior está presente y sólo pide que lo escuchemos.
Todo el poder está en el interior. Siempre ha sido así.
Amelia Camacho Guerrero.
23 septiembre 2024.