El espejo.

Esto está presente en el tiempo que vivimos, el salón de los espejos  es para todos una manera de orientar nuestra atención hacia aquello que hemos de observar para trascender día a día. 

Cada momento nos guía hacia el objetivo que elegimos cuando tomamos la decisión de ver por nosotros y cumplir con una misión que al venir a la tierra tomamos y no recordamos por mucho, mucho tiempo.

Hoy nos encontramos frente a ese contrato y es necesario recordarlo para participar en el proceso de Ascención que estamos experimentando.

Nuestra participación es muy importante y es hora de ver lo que no hemos podido percibir en el interior, es por eso que todos los espejos en los que nos reflejamos nos hablan de la misión que aún no completamos.

Cada vez que éste indicador se hace notar es el llamado para voltear hacia nosotros y reconocer algo que está pendiente de ver y aceptar, algo que en el inconsciente actúa para ser reconocido.

Los movimientos energéticos que sentimos ayudan a manifestar emociones que acompañan estás características y es a través de ellas que podemos  enfocar la consciencia para avanzar en el conocimiento de nosotros mismos.

La manifestación de emociones escondidas es una pauta para hacer ésta tarea y podemos sorprendernos al sentir esa revolución emocional pensando que vamos en retroceso cuando creímos haber hecho  este proceso anteriormente. No hay retroceso , hay que revisar a profundidad para desaprender lo que hoy ya no necesitamos.

Aprovechemos las señales y continuemos en el camino de crecimiento de consciencia con amor y aceptación.


Amelia Camacho Guerrero.

17 mayo 2021.