El consumismo.


Consumir es una condición de la vida cotidiana debido a la manera en que la sociedad se ha ido desarrollando.

Reglas , condiciones, leyes, normas que en todos los ámbitos han existido para determinar la conducta del ser humano, incluyen la atención hacia afuera, donde todo se presenta de maneras infinitamente atractivas para que no prestes atención a tí.

Se consume de todo. Y sin preguntarte caes en las trampas de la mercadotecnia y de la oferta de productos que muchas veces ni siquiera necesitas.

Todo resulta atractivo e invitante al consumo variado de satisfacción de los sentidos. La búsqueda del placer se convierte en un objetivo importante.

Ser capaces de descubrir que es lo que nos nutre, de que nos alimentamos,  será muy interesante para revisar el tipo de energía que consumimos y cuál es la frecuencia vibratoria que expresa nuestro cuerpo.

La acumulación de objetos, de alimentos, de información, de ropa, de posesiones adquiere una significación importante cuando sirve para nutrición de la identidad personal.

Salir de esta rutina equivale a la liberación de rutinas equivocadas que nos alejan de la consciencia de nosotros para desarrollar el interés por conocer a nuestro ser y soltar la falsa identidad que alimentamos.

Todo lo que nuestros sentidos perciben es lo que nos nutre. De ahí que elegir las impresiones que preferimos se convierte en un acto de consciencia.

Buen alimento en todos sentidos.

No solo lo que entra por la boca.

Todo lo percibo, lo interpreto y lo significó y es con lo que constuyo la realidad que vivo.


Amelia Camacho Guerrero.

2 julio 2024.