Día de Gracias.

Es un día que, por diferentes razones, motiva para expresar agradecimiento por las infinitas cosas que una consciencia percibe.

Es una invitación a la reflexión que internamente se siente y provoca que la palabra, ¡ Gracias ! tenga un sentido profundo en el interior haciendo que vibremos en esa alta frecuencia que el corazón conoce y le hace estremecer con emociones que conectan con la divinidad que habita en todos los seres.

Sentir agradecimiento es algo sublime, que puede expresarse de variadas formas.

Pensar en esto es colocarse en niveles frecuenciales conectados con el amor.

Ha de ser un día en el que se repita  el ejercicio de la manifestación de ver, sentir y comunicar, de modo individual, el agradecimiento amoroso por las infinitas bendiciones que experimentamos.

Dejar que el corazón grite: ¡ gracias ! En todo momento.

La experiencia humana nos coloca ante situaciones, personas, eventos, emociones que necesitan ser valoradas desde la consciencia para así percibir los regalos de todos los días.

La vida que fluye en la entidad biológica que habitamos nos da la posibilidad de conocernos y descubrirnos, es la mayor riqueza, el tesoro más grande que hemos de agradecer con todo el amor que cabe en nuestro interior.

Una vida de agradecimiento es una vida de amor y consciencia.


Amelia Camacho Guerrero.

26 noviembre 2020.