Confianza.


Es una palabra con un contenido cargado de conocimiento y de significado proveniente de todo lo vivido, de lo aprendido a través de las diferentes fuentes de información a las que todos hemos estado expuestos.

Ganar confianza y tener confianza han sido objetivo de talleres, procesos de introspección y de estudio para crecer y tener acciones que sirvan para sentirnos bien y desempeñarnos con seguridad en la vida.

Buscar la confianza en el exterior, en otras personas, en algo abstracto, en algo sobrenatural, en algo mágico ha alejado a todos del conocimiento de lo que es. 

Aprender a poner la confianza fuera de nosotros, nos condujo a grandes desilusiones y grandes fracasos, a sufrimiento y culpas, a resentimientos y pérdida de relaciones. Hemos vivido queriendo confiar en todo menos en nosotros mismos. Y ha sido así porque no hemos sabido como se hace esto.

Confiar en otro porque así no nos hacemos responsables del resultado de algo, delegamos y luego manipulamos y culpamos.

Confiar en uno mismo es indispensable para crecer en consciencia y para ello se requiere el conocimiento de la psicología de uno mismo, de lo que aceptamos y de lo que no, de lo que somos y de lo que no somos, de lo que nos inventamos y de lo que es verdad en cada uno.

Si, no es tan simple. 

Se necesita valentía para reconocerse, honestidad para verse y profundizar para poderse amar se vea como se vea. Una vez recorrido ese camino se puede confiar en si mismo y se aprende a confiar en los demás.

Sabremos de que somos capaces y seremos responsables de nuestras acciones. Creceremos en coherencia de pensamiento, sentimiento y acción.  Eliminaremos el juicio y la crítica y respetaremos a los demás en sus vidas y actitudes.

La confianza ganada en consciencia nos conduce a una experiencia de vida saludable y pacífica, feliz y ausente de contradicciones.

Una vida sin conflictos internos es una vida sana y feliz.


Amelia Camacho Guerrero.

4 julio 2022.