Condicionamientos.

Es tan inconsciente la manera en que recibimos todo tipo de influencias que ni siquiera nos damos cuenta del control que aceptamos como algo natural en la educación que las instituciones que nuestro mundo nos da.

Cuando mencionamos instituciones hemos de reconocer la sociedad entera.  Familia, escuela, iglesia, trabajo, comunidad, cultura, raza, país y cada una aporta una idea, un deber ser, un tener que, un hay que, un no se puede, un tu no, un imposible, un no es para ti, y así mil y un cosas más.

Aprendimos a vivir con esas ideas que no pudimos contravenir por la necesidad de ser aceptados en el mundo. Por la necesidad de ser amados. Por miedo a ser nosotros mismos. Por temor a ser diferentes. Por depender de la opinión externa. Por complacer eternamente a todos.

Es tiempo de trascender el pasado y soltar todo lo que impide el crecimiento emocional, mental y más que nada el espiritual.

Lo vivido en la inconsciencia ya nos ofreció lo necesario para despertar de la ilusión y darnos cuenta de que soñar no es vivir, que vivir es CREAR, ahora es momento de crear nuevas experiencias en consciencia de lo que sabemos que somos. 

Los condicionamientos han sido ilusiones, falsedades que vivimos con sufrimiento y desilusión, con tristeza y frustración y eso , se acabó. 

La consciencia nos libera de esto y abre la puerta de la creación. La prisión de las ideas está en la mente y liberarnos de esa prisión es decisión propia.


Amelia Camacho Guerrero.

16 septiembre 2020.