Año Nuevo, ¡ Vida nueva !
Esta expresión tan repetida, hoy tiene un verdadero sentido ante las actuales circunstancias que todos experimentamos.
Tener una vida nueva es, hoy , ese cambio que desde hace ya algunos meses, nos coloca en una nueva realidad, una que tal vez en la mente no sea lo clara que realmente es.
Estamos en ese camino , el cambio empezó desde entonces y continuará por algunos años.
La nueva vida la llevamos dentro. La nueva vida depende de cada uno, refiriéndose a como decidimos vivirla. Las circunstancias no nos van a ofrecer alternativas más que de más cambios. Nosotros mismos seguiremos cambiando de respuestas, de visiones de la realidad y de todo lo que conforma nuestro mundo, tanto interno como externo.
Este año que termina marca un antes y un después. Deja huellas de muchos momentos y de muchas experiencias muy particulares.
Nada será igual a lo conocido. Hay mucho por descubrir. Hay mucho más por aprender.
En el balance personal, encontraremos lo que nuestra consciencia nos ha ofrecido para avanzar con aceptación y armonía y también todo lo que significamos como obstáculo.
Recordar que todo sucede para bien aunque no lo podamos comprender así, es una reflexión que nos lleva a profundizar en nuestro interior y a encontrar la sabiduría que poseemos.
La ganancia que éste tiempo nos deja está en la forma en que percibimos la realidad.
Mucho que agradecer? Si, mucho.
¿ Como que ? Como la gran oportunidad de vivir ésta época y este tiempo de transformación de la humanidad en consciencia. Como el valorar lo más importante e invaluable de esta experiencia, como el amor que somos capaces de sentir y compartir, no importando las condiciones en que hemos estado. Y como esto mil cosas más.
Mucho podemos escuchar y también mucho podemos comprender si logramos que nuestro corazón esté conectado con nuestros pensamientos, ellos con la consciencia nos darán las mejores respuestas.
Todo lo que ha sucedido ha sacudido a todos desde lo más profundo y eso tiene un propósito de crecimiento y de encuentro con nosotros mismos. Algo que fue necesario para despertar a la consciencia dormida que tenía que darse cuenta de que somos mucho mas que las circunstancias que nos rodean, de que en el interior de cada uno existe la divina chispa del creador siempre guiando y conduciendo las experiencias que elegimos.
El despertar puede ser muy incómodo porque nos obliga a ver lo que no podíamos ver en el sueño profundo en el que vivíamos.
Soltar la resistencia y aceptar que todo es para bien es un gigantesco paso para vivir de manera diferente, creando todo nuevo.
Celebremos la vida como no lo hemos hecho antes, celebremos el amor, celebremos estar con todos los que amamos, aceptemos vivir en armonía y confiemos bajo cualquier circunstancia que saldremos adelante.
Deseo para todos infinita conciencia, amor, consuelo, compasión, aceptación y salud.
Deseo también que el corazón de la humanidad sea iluminado por el amor del Creador en cada momento de su experiencia .
Amelia Camacho Guerrero.
31 diciembre.2020.