Amar la vida porque es la razón por la que podemos conocerlo todo, porque estar conscientes de lo que esto representa es darnos cuenta de que, vivir significa experimentar todo lo que podamos y es fundamental para tener la plenitud de vida que anhelamos.
Amor a la vida, amor a nuestros semejantes, amor a nosotros mismos, amor en todo lo que hacemos. Bueno.... este es un objetivo que hemos de tener presente siempre.
Para muchos es fácil decirlo, repetirlo y predicarlo, pero hacerlo realidad no resulta tan sencillo.
Esto puede ser el objetivo de la vida, puede ser la motivación para llenar la existencia de este propósito y abocarse a lograrlo momento a momento.
Arriesgarnos a sentir, a amar sin temor, a explorar todas las emociones que somos capaces de conocer, a darnos la oportunidad de sentir los placeres que los sentidos nos ofrecen, tener la amplia visión que solo la consciencia nos da para soltar las ataduras mentales que impiden el disfrute de lo que el ser desea manifestar.
Hacer a un lado los condicionamientos adquiridos y así obtener la libertad interior que facilite la expresión del alma en lo que se propuso hacer al querer vivir la experiencia humana.
Amelia Camacho Guerrero.
15 junio 2019.