Aceptación con la mente amplia y llena de gratitud es algo digno de consideración y de atención.
No ha sido nada sencillo ,en este momento del tiempo que vivimos que lo hace complicado y más ,si mantenemos fija la mirada en el exterior. Afuera suceden muchos eventos que sacuden a la humanidad.
Mantener el enfoque en uno mismo no resulta tan fácil ,cuando no se tiene el respaldo de conocimiento de uno y no hay una intención de estar en el centro para conservar una actitud neutral que impida la identificación y el juicio constante ante lo que se percibe.
Aceptar no es estar de acuerdo, es ver objetivamente y aceptar la realidad tal como es.
Esto tampoco es ser indiferente o insensible, porque hay muchas situaciones que nos mueven emocionalmente. Cuando no hay una madurez emocional todo nos sacude ,nos sentimos afectados por hechos que no está en nuestras manos resolver.
Atender a nuestras intenciones de apoyo, de ayuda es importante ,siempre considerando, lo que si pueda tener un efecto real para realizar el propósito de nuestra alma.
Vivir en aceptación de la realidad y darle sentido a nuestras intenciones con acciones conscientes ,se convierte en un propósito de la existencia.
Practicar día a día esta experiencia es poner en práctica lo comprendido a lo largo del camino de aprendizaje.
Aceptando, eliminando la participación del ego, escuchando la voz interior que desde el corazón nos guía y conduce a un mayor nivel de consciencia.
Amelia Camacho Guerrero.
23 septiembre 2021.