Vergüenza, culpa y miedo.

En la vida de todos existen estas expresiones que llenan la existencia de pensamientos y emociones que lastiman y hacen de la vida un infierno.

Las muchas decisiones que dia a día tomamos se matizan del significado que cada uno les imprime y muchas veces se cree que son la forma normal de vivir las porque todos las viven igual .

 Las creencias que nos impulsan para hacer lo que hacemos dan significados que no son sanos para nuestra forma de pensar, creando así respuestas que se traducen como: vergüenza  o culpa, las que por miedo no se pueden reconocer fácilmente.

Las muchas decisiones que tomamos a lo largo de la vida conllevan percepciones cargadas emocionalmente de manera inconsciente con todo lo aprendido y la vergüenza , la culpa y el miedo han sido resultado de ese aprendizaje.

Sentir vergüenza por ego crea sufrimiento y malestar, misma que, al depender de la opinión externa, se cree que todos se dan cuenta de ella, como si esta fuera el centro de atencion.

Sentir vergüenza por el efecto regulador de la consciencia ayuda al crecimiento interno y esta se experimenta internamente, se supera con la comprensión y aceptacion de los hechos y se convierte en conocimiento propio.

La culpa es una carga que daña mucho y genera deuda. Quien siente culpa, tiene deuda que paga de muchas maneras. Quien culpa a otros les cobra la deuda tambien de muchas formas. La culpa se relaciona con la soberbia de creer que lo que sucede y afecta a otro es responsabilidad de uno y esto no es así.

  Lo que sucede en los demas es responsabilidad de los demás. Tomar responsabilidades ajenas crea culpas que se convierten en deudas y las deudas se pagan o se cobran.

Todos tenemos un mundo interno donde nadie puede entrar ni hacer nada que nosotros no queramos. Ni hacernos felices  ni hacernos daño, ni crear nada que nosotros no permitamos, por eso hemos de ser responsables de lo que sucede en nuestro interior y no culpar a nadie de lo que vivimos. Los hechos son lo que son pero la interpretacion es de cada uno.

Dejar el miedo atrás y hacernos responsables de lo que somos y vivimos es un cambio radical en la vida de todos, es un acto de amor que por consciencia de nosotros mismos nos hace amar a los demás y a liberarnos y liberar a los otros. 


Amelia Camacho Guerrero. 

5 Febrero 2018.