La tierra evoluciona como todo lo existe. Nada hay en este hermoso universo que este inmóvil. Todo esta inmerso en un movimiento eterno que da como resultado la manifestación de la vida en todas sus formas.
Tiempo de voltear a ver sus cambios. Su lenguaje nos invita a ser conscientes de lo que hacemos en ella. Es nuestra casa y así como de manera particular cuidamos de donde vivimos , así también hemos de darnos cuenta de lo que " ella " , ahora pide que hagamos por ella.
Tener una consciencia amplia indica ver con mucho cuidado lo que sucede a nuestro derredor. La forma en que nos relacionamos con todos los seres vivos es estar a favor de la vida en nuestro hogar.
Muchos actos cotidianos, de todos, hablan del gran descuido e inconsciencia que la humanidad entera ha manifestado. Y los resultados los estamos viviendo sin participar adecuadamente. Todo pide mas atención y compromiso.
Las plantas, los animales, las personas, todo lo que nos rodea , recibe los efectos de nuestros actos. Participar en nuevas acciones no ha de ser producto de programas de moda, de acciones temporales que pasan y que no conduzcan a cambios de actitudes que beneficien realmente las formas de vida en este planeta. Nuestra participación exige mas.
Podemos empezar por exponer estas ideas a otras personas para ayudarlas a crear consciencia en este aspecto. Hablar con convicción, con certeza de que podemos llegar al corazón de otros que, como nosotros, también les interesa que nuestra casa reciba nuestro amor y nuestro cuidado.
Amelia Camacho Guerrero.
5 Septiembre 2016.