Coherencia.

Hablar de coherencia suele ser difícil ya que es una ilusión la que nos hace creer que todos somos capaces de vivir en un mundo donde  todo sucede como lo pensamos .

Decir y hacer, hablar y actuar de acuerdo a lo que manifestamos es una realidad que no existe. Todos sabemos que la mente dice lo que quiere y no es lo honesta que debiera ser. Nos vemos de una manera muy diferente a la que verdaderamente somos . 

Vivimos en constante identificación con todo el entorno y sobran razones para perder la atención del momento presente. 

Cada una de estas experiencias toca una idea, o una acción, o una emoción con la que nos perdemos y dependerá de nuestro nivel de consciencia el tiempo que le damos a la identificación. A veces retomar el camino es rápido, pero en ocasiones la fuerza de la mecanicidad hace imposible darse cuenta de que estamos fuera de nosotros mismos. 

Es útil poder observar como la máquina puede ganar terreno a la consciencia. 

Es bueno poder darse cuenta de que la justificación acompaña a la inconsciencia y que esta puede encontrar aliados que impidan frenar la acción mecánica.

Todo esto sucede siempre para ayudarnos a ser conscientes de que vivir en consciencia no es fácil en el mundo en que vivimos siendo bombardeados por tantas y tantas impresiones que tocan todos los aspectos de nuestro mundo,  de nuestra personalidad. 

Cada momento nos recuerda lo atentos que hemos de estar para no identificarnos. Darnos cuenta a cada momento de que podemos dormirnos otra vez . Hemos estado dormidos e inconscientes de nosotros mismos por tanto tiempo que se requiere de disciplina y atención para retomar el camino.

La coherencia se desaparece de nuestro escenario cuando estamos ausentes de nuestra vida, cuando la identificación con todo anula nuestra presencia y no existe un órgano regulador,  que es la consciencia, que haga que dimensionemos los eventos para no perdernos en ellos . El ego hace todo muy complicado y solo la consciencia hace que la objetividad nos mantenga en el presente.


Amelia Camacho Guerrero. 

7 Junio 2018.